Limones en uno de los plenos, ya con minoría, en Alcalá de Guadaíra/SA

El PSOE de Alcalá denuncia «maniobras para socavar la imagen del candidato»

Siete preguntas para entender la investigación sobre ACM

El caso de presunta corrupción en el seno de la empresa pública de comunicación de Alcalá puede ser un lastre importante de cara a las próximas municipales.

Este caso de presunta corrupción y malversación de fondos ha cobrado especial protagonismo en un momento crucial. A escasos siete meses de las próximas elecciones municipales, los socialistas de Sevilla van a seguir confiando en sus alcaldes como los grandes baluartes para los comicios. Esto significa que el PSOE no plantea un sustituto para Gutiérrez Limones salvo giro dramático en los acontecimientos, quien ya ha sido ratificado como candidato y repetirá como cabeza de lista para la Alcaldía en 2015.

Sin embargo, el caso de ACM puede restar un puñado de votos de vital importancia en las filas socialistas. Actualmente, el PSOE cuenta con 12 concejales -tras la salida del PSOE de Laura Ballesteros, que ahora ejerce como concejal no adscrita- y gobierna en minoría. Cabe recordar que en las municipales de 2011, los socialistas mantuvieron la mayoría absoluta por escasamente 80 votos y, posteriormente, en las últimas elecciones autonómicas de 2012, el PSOE se hizo con la victoria por menos de 4.000 votos de diferencia con el PP, cuando en las elecciones de 2008 la diferencia entre ambos partidos era de unos 10.000 votos.

La intención de Gutiérrez Limones es seguir siendo alcalde de Alcalá y ese deseo ha frenado otras opciones que ha tenido para salir de la Alcaldía sin hacer ruido. La que fuera su rival para liderar el PSOE de Sevilla, actual presidenta de la Junta, Susana Díaz, ofreció a Limones ocupar uno de los puestos en las listas del partido para las elecciones europeas del pasado mes de mayo. Pero este ofrecimiento iba acompañado de la condición de desvincularse del partido y, por supuesto, decir adiós al sillón de alcalde, que mantiene desde 1995.

Pero su reelección viene en uno de los peores momentos momentos. Con la sombra de la corrupción y con un PSOE local debilitado y dividido, donde el sector crítico al alcalde se hace fuerte y ha provocado desde 2013 la salida de dos miembros del Gobierno con el que comenzó su mandato. A esto se suma la ‘nueva cultura’ política que está demostrando la oposición a Limones en Alcalá.

Un ‘nuevo gobierno’ de la oposición

Antonio Gutiérrez Limones accedió a la Alcaldía en 1995 y desde 1999 lleva gobernando en Alcalá de Guadaíra con mayoría absoluta. La salida en 2013 de una de sus concejales provocó que el Gobierno municipal quedara en minoría y afrontara una situación inédita: la unión en bloque de la oposición. La oposición en el Ayuntamiento alcalareño la conforman PP, PA e IU más la concejal no adscrita y, hasta el momento, están consiguiendo superponer unos acuerdos de mínimos a sus diferencias ideológicas.

De hecho ya son varias las propuestas que han votado en bloque para situarse en contra de las decisiones del PSOE, algo que los socialistas califican como un ‘pacto antialcalá’. La primera fue situar las sesiones plenarias en horario de tarde para fomentar la participación. Tras ella, vinieron otras medidas que la oposición votó en bloque: la reducción del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), la reducción a la mitad de los sueldos de los concejales, la eliminación de las plusvalías en las daciones en pago o la paralización de la tasa de basuras.

Sin embargo, una de las medidas en las que los partidos de la oposición han mostrado mayor unidad ha sido en el rechazo a la ‘liquidación exprés’ de la empresa pública ACM, entidad que está siendo objeto de investigación por el juzgado de instrucción nº 2 de Alcalá. PP, PA e IU votaron en contra de la liquidación de la empresa por carecer de la información suficiente y pusieron el asunto en manos del juzgado nº 2 de lo Mercantil de Sevilla, que actualmente está analizando el caso.

Esta experiencia está sirviendo a los concejales de la oposición para manejar frecuentes negociaciones y alcanzar acuerdos conjuntos -aunque muchos de ellos no están siendo ejecutados por el Gobierno socialista-, circunstancia muy poco frecuente en Alcalá en los últimos tres lustros y que está dejando ver un nuevo escenario político que podría repetirse en el futuro. De hecho, si ningún partido obtiene la mayoría absoluta, no parece descabellado afirmar que Gutiérrez Limones no repetirá como alcalde de Alcalá, dado el escenario de nulo diálogo a ninguno de los niveles entre los socialistas y el resto de formaciones.

La propia portavoz del PP de Alcalá, María del Carmen Rodríguez Hornillo, principal partido de la oposición, ya dejó entrever esta posibilidad en una rueda de prensa conjunta con el resto de formaciones en la que, reconociendo las diferencias ideológicas entre los partidos, aseguró que todos los grupos convergen en un punto común: «Gutiérrez Limones se ha convertido en un obstáculo para el desarrollo de Alcalá de Guadaíra”. El diálogo con Izquierda Unida y el Partido Andalucista está cerrado hace mucho y ninguna de estas formaciones apostaría por brindar su apoyo a un PSOE que se enfrenta al desgaste de 34 años de gobierno, 20 de ellos con Limones a la cabeza, y a un posible caso de corrupción de confirmarse todo lo que está saliendo a la luz sobre ACM.

Las próximas elecciones, claves en su futuro

Por ello, Gutiérrez Limones se lo juega todo a una carta. Gran parte de su futuro se decidirá en las próximas elecciones. De ganar, habría que comprobar cómo es capaz de afrontar un gobierno con un PSOE desgastado y salpicado por las irregularidades contables de la empresa pública. Y si no resulta vencedor, Limones sería un ‘cartucho quemado’ que obligaría al PSOE a buscarle un sustituto inmediato.

Habrá que estar atento a la confección de las listas ya que, desde Sevilla, el aparato socialista controla de cerca a la agrupación alcalareña donde, a buen seguro, intentará introducir perfiles de su confianza que puedan, llegado el caso, impulsar la renovación del PSOE alcalareño.

En este caso, es complicado conocer con exactitud si tendría hueco en algún órgano político -a priori difícil por la rivalidad que mantiene con Susana Díaz- pero lo que parece evidente es que estaría muy alejado de lo que siempre ha querido: tener el poder y el prestigio de liderar la segunda ciudad de Sevilla tras la capital. 

Nació en Sevilla y pronto supo que lo suyo sería la comunicación. Es licenciado en Periodismo en la Universidad de Sevilla y Máster en Marketing Digital por la Universidad de Málaga. Especialista...