La denuncia fue interpuesta por agentes de la Policía Local contra un comisario de la Policía Nacional y la concejal de Gobernación por impedir a los agentes locales el ejercicio de sus funciones.

El juzgado número uno de Alcalá de Guadaíra ha desestimado la denuncia por desacato y coacciones planteada por varios agentes de la Policía Local contra la concejal de Gobernación, Mariló Gutiérrez  y el comisario jefe de la Comisaría de la Policía Nacional, Luis Lucena. En la sentencia se afirma que la actuación de los policías locales fue incorrecta y probablemente  movidos por una situación de enemistad manifiesta contra los denunciados.

La denuncia desestimada ahora fue interpuesta en octubre de 2013 por varios agentes de la Policía Local que se vieron implicados en unos hechos que se iniciaron cuando un hijo, con minusvalía psíquica, del comisario jefe de la Policía Nacional en Alcalá de Guadaíra  se encontraba en el patio del ayuntamiento y el perro lo siguió sin atar, entonces uno de los denunciantes le ordenó sacarlo, a lo que el dueño del perro respondió pidiéndole al agente que llamara a un familiar.

En ese intervalo se presentó la concejal responsable de Gobernación, Mariló Gutiérrez, quién quiso mediar para solucionar “la situación impropia ocasionada por los agentes” y con posterioridad fue el propio comisario jefe de la Policía Nacional quien acudió para recoger a su hijo, momento en el que los agentes le solicitaron que se identificara.

En los razonamientos jurídicos del auto se recoge que tal y como expone en su escrito el Ministerio Fiscal,  “de forma coherente, exhaustiva y brillante, no concurren en el caso presente hechos de relevancia penal dado que la actuación de los agentes de la Policía Local fue incorrecta y probablemente movidos por una situación de enemistad manifiesta con el comisario de esta localidad y la concejal, ya que era obvio la minusvalía psíquica presentada por el hijo del comisario, Luis Lucena, y el conocimiento pleno por parte de los agentes de tal minusvalía y de la condición del comisario denunciado, Luis Lucena, siendo así que el requerimiento a identificarse era innecesario e incorrecto el compartimiento hacia su hijo”.

De igual forma, y según la sentencia tampoco puede admitirse que la actuación de la concejal Mariló Gutiérrez “sea constitutivo de ilícito penal alguno, por cuanto la conducta de la misma únicamente fue dirigida a intentar remediar la situación impropia ocasionada por los agentes”.

En la parte dispositiva la magistrada-juez, Mercedes Lage de Llera,  ordena remitir el testimonio de las actuaciones al Jefe de la Policía Local por si procediera la apertura de un expediente disciplinario contra los agentes a sus cargos implicados.